Una nueva iniciativa destinada a fomentar la crianza en brazos y el apego de madres, padres con sus hijos recién nacidos, realizó el Cesfam Raúl Silva Henríquez, que dirige el doctor Claudio Miranda.
Se trató del segundo Curso de Porteo Crianza en Brazos, dictado por la educadora de párvulos del Cesfam, Paulina Pedraza. En esta oportunidad, la actividad estuvo dirigida no sólo a madres y futuras más, sino también y muy especialmente a los padres, con el objetivo de trabajar y fomentar en ellos la paternidad activa.
La idea, según explicó la profesional, es “motivar a los papás que ya vienen a los controles de salud a que sigan viniendo, además de recalcarles la importancia que tienen en la crianza. Trabajamos con matronas, médicos, nutricionistas, enfermeros en ese objetivo”, señaló.
Tal como en el primer taller, la educadora de párvulos Paulina Pedraza, realizó una didáctica clase de cómo usar un Mei Tai, nombre que se le da al tradicional portabebé de origen asiático, utilizado desde tiempos inmemoriales.
Su uso es considerado una excelente práctica para generar seguridad y estímulos que enriquecen el desarrollo neurobiológico del lactante, ya que todos sus sentidos se activan cuando es cargado en brazos. Además, les permite sentir movimiento y contacto físico, ayudando a desarrollar su visión, olfato, tacto y audición.
Al generar confianza y contención, por la posición en la cual está, el bebé se siente acompañado, disminuyendo su posibilidad de llorar, lo que genera que se fortalezca su base emocional segura y estable, lo que beneficia su independencia posterior.
Se trató del segundo Curso de Porteo Crianza en Brazos, dictado por la educadora de párvulos del Cesfam, Paulina Pedraza. En esta oportunidad, la actividad estuvo dirigida no sólo a madres y futuras más, sino también y muy especialmente a los padres, con el objetivo de trabajar y fomentar en ellos la paternidad activa.
La idea, según explicó la profesional, es “motivar a los papás que ya vienen a los controles de salud a que sigan viniendo, además de recalcarles la importancia que tienen en la crianza. Trabajamos con matronas, médicos, nutricionistas, enfermeros en ese objetivo”, señaló.
Tal como en el primer taller, la educadora de párvulos Paulina Pedraza, realizó una didáctica clase de cómo usar un Mei Tai, nombre que se le da al tradicional portabebé de origen asiático, utilizado desde tiempos inmemoriales.
Su uso es considerado una excelente práctica para generar seguridad y estímulos que enriquecen el desarrollo neurobiológico del lactante, ya que todos sus sentidos se activan cuando es cargado en brazos. Además, les permite sentir movimiento y contacto físico, ayudando a desarrollar su visión, olfato, tacto y audición.
Al generar confianza y contención, por la posición en la cual está, el bebé se siente acompañado, disminuyendo su posibilidad de llorar, lo que genera que se fortalezca su base emocional segura y estable, lo que beneficia su independencia posterior.
