El módulo didáctico dirigido a directores, docentes, duplas PIE y la comunidad educativa de los establecimientos de la Corporación Municipal Gabriel González Videla, tuvo por objetivo presentar esta problemática, como una de las formas más abusivas de trabajo infantil, ejercida por un adulto hacia un niño, niña o adolescente, por lo que es fundamental, aunar esfuerzos en materia de prevención y protección de las víctimas.
La actividad a cargo de la asistente social de la Corporación Municipal, Elizabeth Jara Gutiérrez, convocó a los profesionales Begoña Irrazabalaga, sicóloga y a Samuel Hernández, sociólogo, pertenecientes al grupo de profesionales que trabajan en el Programa Especializado de Protección EVEN, que promueve la prevención y autocuidado, relacionado con la Explotación Sexual Comercial de Niños, Niñas y Adolescentes.
Durante el desarrollo del módulo, ambos relatores se refirieron a los factores que exponen a los niños, a un caso de explotación sexual comercial, y en el cual, los educadores pueden intervenir, promoviendo, además, prácticas de autocuidado y generar mayores redes de apoyo y protección a la población infantil más vulnerable.
Lo más interesante, es que a los participantes se les presentó un caso ficticio, dividiéndose en dos grupos, el primero, se enfocó en las víctimas de ESCNNA y el segundo en el perfil del victimario, con el objetivo de realizar un análisis y síntesis del caso y posteriormente generar un diálogo participativo entre ambas partes.
La actividad a cargo de la asistente social de la Corporación Municipal, Elizabeth Jara Gutiérrez, convocó a los profesionales Begoña Irrazabalaga, sicóloga y a Samuel Hernández, sociólogo, pertenecientes al grupo de profesionales que trabajan en el Programa Especializado de Protección EVEN, que promueve la prevención y autocuidado, relacionado con la Explotación Sexual Comercial de Niños, Niñas y Adolescentes.
Durante el desarrollo del módulo, ambos relatores se refirieron a los factores que exponen a los niños, a un caso de explotación sexual comercial, y en el cual, los educadores pueden intervenir, promoviendo, además, prácticas de autocuidado y generar mayores redes de apoyo y protección a la población infantil más vulnerable.
Lo más interesante, es que a los participantes se les presentó un caso ficticio, dividiéndose en dos grupos, el primero, se enfocó en las víctimas de ESCNNA y el segundo en el perfil del victimario, con el objetivo de realizar un análisis y síntesis del caso y posteriormente generar un diálogo participativo entre ambas partes.
